Sorbete de cava y limón

Hoy es una noche especial, de esas en las que no paras y, al final, o bien acabas cenando a toda prisa para poder prepararte las uvas, o bien cenas demasiado pronto y luego acabas haciendo tiempo mientras esperas las campanadas.

Estos días se suceden cenas de trabajo, con amigos... las navidades siempre son una excusa perfecta para poder quedar (como cualquier otro día!), y acabamos siempre comiendo demasiado. Hace pocos días tuve una cena de "trabajo" con unos amigos. La encargada de traer el postre trajo lo mismo que la última vez, y consiguió el mismo resultado: el postre voló. Es insultantemente fácil de preparar y sencillamente perfecto para después de una cena: ligero, digestivo y con un punto muy suave de alcohol. Para degustarlo necesitaremos:

INGREDIENTES:

• Una botella de cava de 750 cl
• Una tarrina de helado de limón de las de 1'5l

UTENSILIOS:

• Una olla donde quepan el helado y el cava y no vaya muy apurada
• Minipimer
• Copas en las que servirlo
• Cucharón (para servirlo)

PROCEDIMIENTO:

IMPORTANTE: el helado debe meterse en la nevera unas 2 horas antes de preparar el postre, para que esté bien cremoso. El cava en este caso también es importante que esté bien frío.

1. Echamos el helado en la olla. Podemos ayudarnos con una cuchara para que no quede ningún resto en la tarrina.
2. Vertemos el cava con cuidado para que no se convierta todo en espuma.
3. Si ya está lo suficientemente cremoso el helado, podemos atacar ya con el minipimer. Si no lo está, primero lo chafaremos un poco con el cucharón para que se vaya esparciendo y tenga una textura que nos permita mezclarlo todo bien.
4. Vamos batiendo con el minipimer hasta conseguir la textura deseada. En función de las proporciones, quedará más cremoso o menos. Si se desea MUY cremoso, se puede utilizar las varillas del minipimer o similar, pero entonces hay que ir con sumo cuidado con la temperatura: empezar a trabajarlo muy frío, al límite que permita trabajarlo.
5. Servir y disfrutar

Éxito garantizado.

VARIACIONES:

• Si queremos hacerlo más vistoso aún, podemos decorar el borde de la copa con azúcar. Es muy sencillo. Con un poco de zumo de limón humedecemos el límite de la copa y posteriormente pasamos éste por un plato con azúcar. Aquí hay unas imágenes: http://artesana-dulcesabor.blogspot.com/2010_05_21_archive.html Le puede dar el toque definitivo.

Y, de parte de los dos: que tengáis un muy buen fin de año y un mejor 2012!